SUCEDIO AYER......

Navegando por cielos azules, me detuve a descansar en una nube de aparente suavidad, color gris, era suave, fue como caminar encima de un montón de esponjas, pero sin perder el equilibrio, me recosté y quede profundamente dormida, al despertar de mi apacible momento me encontré con una mirada tierna, escondida entre los gajos de nube que se levantaban con cada esfuerzo por levantarme, debo decir que no fue del todo fácil, las nubes son muy suaves y a menudo se mueven para mecer a sus moradores, la mía se seguía meciendo, por fin logre levantarme sin despegar siquiera mis ojos de aquella criatura que había estado velando mi sueño; estuve quieta por unos minutos, realmente poseía una belleza rara, pero sublime, en un momento se escondió y mi mirada perdió sus ojos, pero al voltear para atrás, ahí estaba, como si se tratara de algún juego, solo atine a sonreír, y entonces se produjo lo mas increíble, la criatura sonrió y mi nube gris se torno azul y de mas arriba (el cielo supongo) cayo una lluvia calma de agua cálida y olor a rosas; salude a la criatura, dejo de sonreír pero no se movió, era como si no me entendiera
-No te haré daño- le dije, y entonces se acerco y volvió a sonreír
–quien eres?- le pregunte
–tu lo sabes- dijo, y comenzó a caminar por las nubes, con tanta seguridad y libertad que me hizo pensar que era alguna de esas criaturas que viven en el cielo, de esas que mi abuelo hablaba tanto, de esas que hablan con dragones, de las que se comunican con la brisa del mar, que hacen silencios tan fuertes que lastiman los oídos, que danzan con los árboles cuando el aire toca su melodía, de esas criaturas que ponen los pies en la tierra y nacen flores de colores, de esas criaturas que escuchan todo lo que dicen tus ojos
-Ven- dijo, y yo le seguí.
Caminamos entre las nubes y reconocí mas miradas escondidas, atónitas porque aquella criatura hablaba conmigo, los ojos eran los mismos, dulces, tiernos, profundos. No sabia quien o que era aquella criatura, pero no sentía miedo, al contrario me sentía tan cómoda entre esas sillas que hablaban y las nubes grises que cambiaban de color con cada paso. Así llegamos a una sala con grandes espejo, que increíblemente no me reflejaban y a ella tampoco, mi garganta se contuvo por preguntar que era lo que pasaba, mis ojos la veían y entonces dijo –se lo que piensas, no temas ningún ser humano tiene reflejo, es porque...- y de pronto se escucho un profundo trueno y voltee mas arriba, y al bajar la mirada la criatura ya no estaba, y las nubes seguían grises y los espejos habían desaparecido, sin embargo había un pequeño gajo azul, y aunque ya sentía un poco de miedo decidí buscar a la criatura, me aventure y sin pensarlo mucho atravesé el gajo azul y llegue al lugar de los espejos
-criatura, criatura!- gritaba, pero al mismo tiempo susurrando.
Y volvió a parecer, pero esta vez dentro de un espejo con bordes azules y arena, su rostro era triste esta vez, el juego había terminado,
-que haces aquí? Vamos sal- le dije
-No puedo, no debo hablar contigo- me contesto con tono casi apagado
-por que? Te he dicho que no te haré daño-
-lo se, no podrías aunque quisieras-
-Dime quien eres- le pedí
-Mi nombre es Kené, y te he echado de menos-
-Me conoces? Como?-
-No preguntes mas, por que te cuenta comprender tanto? Soy parte de tu ayer y hoy, y tu mañana, ahora vuelve a tu lugar, pero no me olvides, quiero verte otra vez-
-Pe.. pero Kené, que haces a....-

Y de pronto desperté en mi cama ¿Kene había sido un sueño? Y si era así por que seguí oliendo el aroma a rosas? Me levante y camine hacia mi espejo de bordes azules, en mi reflejo se escribía

¨ Haya arriba no tienes reflejo, tu eres YO y yo soy TU; soy quien que me comunico con la lluvia, me conecto con la naturaleza y comprendo a los sentidos -¿Me reconoces ya?- puedo volar sobre la tierra o caminar en el aire, aprendo de todos las miradas y las melodías de las hojas cuando caen, soy sabiduría y canción, me alimento de tu tiempo y soy alimento de los ángeles, y canto que Dios escucha gustoso, me pierdo a veces pero lo disfruto, soy sonrisa y llanto, se del destino (que en realidad es un pequeño dulce con envoltura azul escondido en una nube), duermo en el agua, en una ola, en un beso, en una caricia, en la arena, o en una hoja; a veces te esfuerzas por conocerme y en otras me escapo de tus dedos, soy frágil no te confundas nunca, puedo llorar, gritar, sonreír o estar callada. Soy tu reflejo, soy tus letras y poesía. Y en alguna noche te he llamado porque me siento perdida y olvidada. Soy tus letras, palabras, oraciones y frases, soy tu libertad creadora. Soy tu poesia, soy tu. atte Kene ¨

Al terminar de leer esto, estalle en llanto, no podía creer que esas magnificas criaturas las creamos los seres humanos, con tal perfección, todo estaba claro, ellos, las criaturas como Kene, eran los reflejos de nuestros deseos e ilusiones, de nuestros sueños y letras, de nuestros pensamientos libres, eran todas nuestras creaciones; entonces pensé en que el abuelo lo sabia, el las conoció un día, y me hablo de ellas, así es abuelo, ahora que no estas aquí ya debes de saber que eran esas hermosas criaturas... Y entonces comencé a escribir, un reflejo como posiblemente le llamaria Kene:

Navegando por cielos azules.....